Prietas las filas...
Poco convincentes deben parecerle a nuestra cisoria
alcaldesa sus argumentos cuando no deja de machacar en hierro frío ya sea en la
tele, la radio, la prensa escrita, internet y los buzones de nuestras casas.
Sacó en su apoyo a las juventudes de su partido,
quienes, en un ejercicio de madurez y reflexión democrática, redactaron un
documento a base de corta y pega de las declaraciones de su ‘lideresa’, como si
de un mal trabajo de clase se tratara.
Ahora salen en su apoyo y defensa las señoras
Mínguez y Abengózar, quienes, acostumbradas tal vez a prescindir de la verdad
en pro de una buena estrategia, hablan de candidez, cuando quieren decir
honradez y recurren al pasado político de Juan Garrido para argumentar a favor
de su tesis de que los y la concejales de EQUO sabían que iban a ser
expulsados. Olvidan o desconocen las fervorosas defensoras de su secretaria
local, que en aquel ayuntamiento del que formó parte el señor Garrido se
dialogaba y se consensuaba incluso con la oposición. Tal vez sea ese el error de
los señores Garrido, García Navas y la
señora Díaz, pensar que se valoraría su trabajo y se les atendería en una
petición razonable y nada exagerada: quince días, señoras, quince días…para
cumplir un compromiso que la propia alcaldesa llevaba en su programa. Si eso no es asumible para salvar un gobierno
que según la señora Melchor funcionaba a la perfección,
explíquen ustedes qué significa dialogar y hacer concesiones.
Vamos a poner
un ejemplo. Cuando se nos planteó entrar a formar parte del equipo de gobierno,
EQUO presentó una serie de condiciones (tenencia de alcaldía, reducción de
liberados) que no fueron aceptadas por la señora Melchor, sin embargo, tras
debatirlo en asamblea, se decidió entrar en el equipo con la convicción de que
íbamos a ser gobierno. Daríamos así estabilidad a la ciudad y podríamos sacar
adelante nuestras propuestas con el apoyo mayoritario de nuestros socios.
Porque socios nos creímos y no siervos.
Citan al paso, desconocemos con qué intención, que
el señor Garrido está siendo asesorado por antiguos compañeros de partido. ¿Qué
partido? Porque si se refieren al PSOE, el hecho es inevitable. Piensen por un
momento y verán que entre expulsados, marginados, desencantados y aburridos
pasan de seis millones los que fueron militantes, simpatizantes, votantes del
PSOE y ya no lo son. Porque ese PSOE ya
no existe.
Sigan ustedes, si así lo decide su asamblea o quien
decida estas cosas en su partido, derivando responsabilidades, cerrando filas,
defendiendo la marca, dando la espalda a la ciudadanía, prescindiendo de la
inteligencia… Si pierden el partido, siempre podrán echar la culpa al árbitro.
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