MIRA TÚ POR DONDE...
Leo en la prensa que el partido de Antonio Jesús García y Andrés Carmona tiene, en la Comunidad de Madrid, un lío con las coaliciones parecido al que han tenido aquí, en Alcázar de San Juan: un día son Ganemos, otro día Nosabemos y puede que acaben siendo Perdemos.
Impugnan y desimpugnan a golpe de calentón (ellos lo llaman “decisión impulsiva”) contra Ganar Alcorcón, Ganar Fuenlabrada, Leganemos, Ganar Humanes y Ganemos Pinto.
He intentado comprender las causas, he buscado la conexión de Juan Garrido con las antedichas localidades, no fuese que hubiera organizado allí también una estrategia destructiva de la vieja izquierda, pero no ha habido suerte. Son otros los protagonistas.
De razones y coherencias no me pregunten, no comprendo nada. Leo y releo y vuelvo a releer, pero sigo sin encontrar la lógica por ninguna parte.
Curiosa y afortunadamente, encuentro, junto a la noticia, unas declaraciones de García Montero, excelente poeta y candidato a presidir la Comunidad, en las que afirma: “Hay gente que no se conforma con irse de IU a Podemos y quiere romper IU por dentro.”
El espíritu y la letra de la sentencia me recuerdan aquella otra de nuestro convecino, y correligionario suyo, en la que afirmaba que no iba a consentir que JG hiciese daño a su partido (o coalición, lo que aún sea).
Parece que es la tendencia, entre la vieja guardia roja, sacudirse las moscas de la responsabilidad y dirigir el fuego de sus cañones oxidados contra quien más a mano esté.
Luego, si hace falta, se tira de manual, se desempolvan ideas mil veces repetidas - que se divide el voto, que todos se confabulan contra su cofradía… - y se pone a funcionar la antigua maquinaria: acusar a quien convenga de lo que convenga. ¿Pruebas? No las necesitan. ¿Para qué? La consigna parece ser: “calumnia, que algo queda.”
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